La noche oscura de Félix Sánchez pero sigues siendo nuestro super sanchez dominicano te queremos

Río de Janeiro.- Cuando la noche es más oscura es porque está a punto de amanecer; lo afirman los poetas y es la única esperanza a la que puede aferrarse el campeón olímpico dominicano Félix Sánchez, luego de perder el título panamericano de 400 metros vallas al tropezar con un obstáculo cuando iba en primer lugar.
Llevaba una excelente carrera, tan buena que al pasar por los 350 metros tenía posibilidades de quebrar su propio récord continental de 48:19 segundos, sin embargo, su pie se quedó atrás antes de la última valla y tras el tropiezo sólo pudo ser cuarto.
"Toqué la valla", fue lo único que dijo a los periodistas que le preguntaron qué pasó; tenía los ojos llorosos y estaba enojado con el mundo porque la noche negra de viernes ha sido demasiado oscura en Río de Janeiro.
Después de ganar los Juegos Olímpicos de Atenas'04, Félix no se ha podido levantar tras reiteradas lesiones; en el 2005 perdió el título mundial y el año pasado ni siquiera ganó medalla en los Centroamericanos y del Caribe de Cartagena, donde el nivel fue bajo.
Hoy era el día; estaba todo planificado y parecía sonreír en el bloque de arrancada, donde se imaginaba el rotundo punto final. Al pasar la mitad flotaba como en los viejos tiempos y en la última recta sacó de sus piernas el remate de antes.
El, que este año tiene apenas 48:86, iba a un ritmo de 48:20 o menos, pero le quedaba una prueba más, esa de las que se empeña poner el destino a tipos con el corazón grande.
Félix Sánchez, que pudo ganar mucho dinero como corredor estadounidense, se levantó y buscó aunque fuera un modesto bronce para República Dominicana, pero había pasado un segundo, que en el atletismo de velocidad equivale a la diferencia entre ganar o no.
Cuarto lugar con 49:28 y un rato más alejado de los 15 mejores de la temporada. Números fatales, pero no hay que confiarse. Hace cuatro años, ganó con 48:19 un mes antes de hacerse monarca mundial y ahora demostró estar listo para correr mejor que eso, a pesar de la ilusión del revés.
La noche es joven aún, si se habla de la temporada de atletismo y por suerte Félix Sánchez lleva años saltando obstáculos, de los de metal como el que lo tumbó hoy, y de los otros. Y siempre los venció.